Es la segunda vez que imparto un curso en el Conservatorio Superior de Música de Vigo y tengo que decir que la experiencia volvió a ser gratificante en muchos sentidos.
En esta ocasión el curso fue sobre la «Preparación Psicológica para las Actuaciones». El punto de encuentro de todos nosotros fue el deseo de comunicar y realizar nuestras tareas en público con mayor naturalidad y satisfacción.
A veces esperamos a tenerlo todo controlado y no sentir ningunos nervios, para entonces entregarnos de verdad a la interpretación. Esto sucede especialmente cuando hay que actuar en público o hacer una prueba. En algunas de las experiencias que se dieron durante el curso pudimos comprobar lo incapacitante que puede llegar a ser esta actitud.
Dar un paso al frente pese a la incertidumbre, aunque el paso sea pequeño, representa una excelente forma de avanzar y de activar recursos de mejora en relación con las actuaciones.
Aunque no dispuse de mucho tiempo libre, tuve la suerte de disfrutar de las buenas vistas desde el Castro que se encuentra a pocos metros más arriba del Conservatorio y desde el que se contempla una espectacular vista de parte de la ciudad y de las islas Cíes.
Agradezco enormemente a la profesora Marta Vélez por la cuidada organización del curso y por todo su trabajo, así como a los alumnos que participaron por brindarme la oportunidad de compartir con ellos su entusiasmo y sus ganas de mejorar en los aspectos relacionados con la actuación.
Gracias a que la gaita está incorporada en los estudios de. CSM de Vigo tuve la posibilidad de conocer este instrumento, las ricas posibilidades sonoras que ofrece y al mismo tiempo comprobar que sus intérpretes también son vulnerables a los rigores del directo.
Me llevo un recuerdo maravilloso de estos días tan llenos de vida y de ganas de avanzar. Muchas gracias a todos por esta extraordinaria experiencia.