Cada cierto tiempo o cuando concluye una etapa resulta beneficioso reflexionar sobre cómo han ido las cosas. Establecer momentos de revisión de vez en cuando, aporta pequeñas dosis de luz que nos orientan en el camino que todavía queda por recorrer.
¿Cómo puedo aprovechar las experiencias de este curso que ahora acaba, para seguir avanzando con mi instrumento? En este artículo te invito a que realices esta tarea. A continuación dispones de algunas propuestas.
Establecer momentos de revisión de vez en cuando, aporta pequeñas dosis de luz que nos orientan en el camino que todavía queda por recorrer.
Comienza por lo significativo
Piensa en el curso que acaba de concluir. ¿Qué hechos han sido relevantes o significativos en relación con tu instrumento y contigo mismo?
- ¿Qué han supuesto para ti?
- ¿Qué has descubierto? ¿En qué área?
- ¿De qué manera te puede servir esto para el futuro?
Compara el principio de curso y el final
Nuestra memoria suele conservar mejor aquellos aspectos que suceden al principio y al final de una situación. Compara cómo te encontrabas a principio de curso, con las sensaciones que hayas podido tener en los últimos días. Recuerda tus primeras clases de instrumento a finales de septiembre o principios de octubre. ¿Cómo fueron?
- ¿Qué trabajaste?
- ¿Qué planes tenías?
- ¿Cómo te veías?
Da ahora un salto en el tiempo y sitúate en las últimas semanas de curso. ¿Cómo te encuentras ahora?
- ¿Qué impresiones tienes en relación a tus sensaciones al tocar?
- ¿Sientes que ha habido progresos?
- ¿En qué áreas o aspectos?
Realiza un breve repaso de las actuaciones en las que has participado: audiciones, exámenes, pases, pruebas, masterclass…
Tocar en público suele representar un reto que se vive de muy diversas maneras. ¿Qué destacarías de estas experiencias durante el curso?
- ¿Cómo fueron?
- ¿Cómo te encontraste?
- ¿Qué crees que te aportaron?
- ¿Cómo era tu sensación de control?
- ¿Crees que ha habido alguna evolución?
- ¿Qué consideras que todavía necesitas para sentirte más seguro cuando actúas para los demás?
- ¿Aprecias diferencias en tu rendimiento?
Analiza cómo ha sido tu estudio
Sabemos que la forma de estudiar influye más de lo que pensamos en los resultados qué obtenemos. ¿Observas alguna evolución en relación a cómo estudias?
- ¿Has mejorado tu organización en la semana y en las sesiones de estudio?
- ¿Has introducido alguna mejora que te lleve a concentrarte más y resolver mejor los problemas que se te presentan en las obras que trabajas?
3 áreas importantes
Otra manera de reflexionar la experiencia de tu curso en relación con tu instrumento musical, tiene que ver con preguntarte por tres áreas clave corporal, psicológica y técnica/interpretativa. Piensa que cuando analizamos una situación concreta contemplamos con mayor cuidado sus aspectos por separado y esto nos ayuda a conocer sus características más relevantes. A partir de aquí puedes extraer ciertas conclusiones.
- ¿Cómo te ve desde el punto de vista corporal?
- ¿Consigues encontrarte más libre al hacer música?
- ¿Eres capaz de disfrutar de experiencias corporales satisfactorias tanto en el estudio como en tus actuaciones?
- ¿Cómo sueles acabar tus sesiones de estudio (buenas sensaciones, cansado, con molestias en algunas zonas…)?
- ¿Cómo ha sido tu motivación durante este curso?
- ¿Qué cosas te suelen motivar para estudiar?
- ¿Cómo estaba tu estado de ánimo en general?
- ¿En qué situaciones te has podido venir un poco más abajo
- ¿Qué dificultades se han podido presentar y cómo las has gestionado?
- ¿Cuánto has disfrutado de este curso?
- ¿De qué cosas sueles disfrutar más?
- ¿Has encontrado un equilibrio entre tu actividad musical y tu vida?
Aspecto técnico/interpretativo
- ¿En qué aspectos técnicos e interpretativos te ves mejor que a principios de curso?
- ¿Qué te cuesta todavía dominar o conseguir?
- ¿En qué has hecho más hincapié a nivel técnico?
- ¿Cómo has planteado las cuestiones interpretativas?
- ¿Cuánto has crecido como intérprete?
- ¿Consigues expresar y expresarte a través de la música?
Pensando en el curso próximo
Finalmente nos toca proyectarnos hacia el futuro. Con la revisión que acabamos de hacer de acontecimientos relevantes y de diversas áreas relacionadas con tu instrumento, ya tienes cargado en tu mente, en la llamada memoria operativa, el material que te ayudará a dar este último paso.
Conociéndome un poco más a partir de lo que acabo de reflexionar, ¿Qué creo que me lleva mejorar con mi instrumento musical?
- ¿Qué aspectos contribuyen en mi caso a avanzar más? (Actitudes, pensamientos, costumbres, acciones, planteamientos …)
- ¿Qué me lleva a sentirme más a gusto con mi instrumento?
De la misma forma, te invito a que hagas la pregunta contraria. ¿Qué creo que me conduce a estancarme o sentirme peor en relación con mi instrumento?
- ¿Qué actitudes, pensamientos, hábitos o planteamientos, me llevan a sentirme presionado, saturado, decepcionado….
Los acontecimientos tanto externos cómo internos, se van sucediendo en el tiempo (los días, las semanas, los meses… y los cursos). Como decíamos al principio, una parada en el camino para descansar y para echar un vistazo al «archivo de fotos» del último curso, nos permite tender puentes con el futuro. La reflexión nos brinda la oportunidad de aprender y mejorar en nuestro continuo aprendizaje musical.
El recorrido continúa en el próximo curso.